Comer durante los brotes de la enfermedad del intestino irritable (EII)
Mayoría enfermedad inflamatoria intestinal (EII) los pacientes reportan beneficios al restringir su dieta durante los brotes.
Sin embargo, restringir su dieta puede aumentar el riesgo de deshidratación y desnutrición proteico-calórica. La mayoría de los pacientes necesitan más calorías, pero tienden a restringir su dieta a comer más alimentos que reduzcan la producción de heces para limitar los síntomas de la EII.
Si bien esta es una solución a corto plazo, es importante saber cómo controlar los síntomas durante un brote y, al mismo tiempo, obtener una nutrición adecuada para prevenir estos riesgos potenciales.
Escucha a tu cuerpo
Cada paciente con EII es diferente.
La enfermedad varía de un paciente con síndrome del intestino irritable a otro; experimentan diferentes síntomas y tienen diferentes reacciones a los alimentos. Por eso es importante escuchar a su cuerpo para saber cómo controlar los brotes de EII.
Algunas personas descubren que no pueden tolerar alimentos durante el brote que normalmente tolerarían.
Una vez que determine sus posibles desencadenantes, es mejor evitar aquellos alimentos que empeoran los síntomas de la exacerbación hasta que la exacerbación desaparezca.
Estos son algunos alimentos que comúnmente aumentan los síntomas durante un brote:
- Cafeína (aumenta la motilidad, deshidratación)
- Alcohol (aumenta la deshidratación)
- Comida picante
- Alimentos ricos en grasas
- Alimentos ricos en azúcar y fibra.
Los líquidos suelen tolerarse mejor que los sólidos; por lo tanto, los suplementos pueden ser algo a considerar.
Consejos de nutrición para ayudarle a superar su brote
- Asegúrese de obtener una ingesta adecuada de calorías y proteínas.
- Los suplementos/polvos de proteínas líquidas (preferiblemente suero) se pueden usar como comidas o con frecuencia durante el día para ayudar a aumentar la ingesta de proteínas y calorías.
- Si eres intolerante a la lactosa, utiliza sustitutos de la leche, como leche de almendras, leche de arroz, leche sin lactosa o leche de coco.
- Evite los desencadenantes alimentarios comunes: comida picante, alimentos ricos en grasas saturadas o trans, ricos en fibra y azúcar.
- Mantenga la hidratación: además de agua, beba líquidos con alto contenido de electrolitos. Por ejemplo: G2, Propel o Powerade Zero, o puedes preparar tu propia solución de rehidratación oral con 1 litro de agua, 6 cucharadita. azúcar y 1/2 cucharadita. sal.
Después de su brote de EII
Después de su brote, debe volver a agregar alimentos gradualmente a su dieta.
Comience lentamente y coma porciones pequeñas. Intente volver a agregar un alimento a la vez.
A veces, los pacientes con EII pueden sentir ansiedad por determinados alimentos de los que les llevará tiempo recuperarse.
Siempre puede programar una cita con su dietista registrado en nuestro Centro de enfermedades inflamatorias del intestino para ayudarle a retomar el rumbo con su nutrición y brindarle orientación para prevenir deficiencias nutricionales después de un brote de EII.