Paciente conectado y sosteniendo un monitor de ECG

¿Qué es un electrocardiograma?

Un electrocardiograma (ECG o EKG) mide la actividad eléctrica del corazón mediante electrodos adheridos al pecho, los brazos y las piernas. Esta prueba de bajo riesgo es una herramienta sencilla, rápida y muy eficaz para evaluar el corazón y diagnosticar enfermedades. La prueba mostrará:

  • Qué rápido late tu corazón
  • Si su ritmo cardíaco es constante o irregular
  • La fuerza y el ritmo de los impulsos eléctricos que pasan por el corazón.

¿Por qué se realiza un electrocardiograma?

Se realiza un electrocardiograma para controlar los latidos del corazón. Muestra qué tan rápido o qué tan lento late el corazón. Es posible que necesite un ECG si presenta síntomas como:

  • Dolor de pecho
  • Mareos, sensación de desmayo o confusión.
  • Latidos cardíacos irregulares o rápidos
  • Frecuencia cardíaca elevada
  • Dificultad para respirar
  • Debilidad o fatiga severa
  • Dificultad para hacer ejercicio

Los ECG también se pueden utilizar después de un diagnóstico. Por ejemplo, es posible que su médico quiera controlar su corazón después de que le hayan diagnosticado un tipo de enfermedad cardíaca o para ver cómo está respondiendo a un medicamento o tratamiento.

Tipos de electrocardiograma

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Los electrocardiogramas generalmente se realizan en un centro de atención médica o en un hospital utilizando equipo especializado.

Sin embargo, es posible que tenga síntomas irregulares que no aparezcan en un ECG en el consultorio de su médico o en el hospital, o que su médico quiera controlar su corazón mientras realiza sus actividades diarias.

En esos casos, es posible que le pidan que use un pequeño monitor de ECG portátil. Estos dispositivos registran la actividad cardíaca durante unos días, unas semanas o incluso unos años, lo que le permite a su médico obtener un panorama más completo de la salud de su corazón.

Existen dos tipos principales de monitorización de ECG portátil:

  • Monitores Holter

    Monitores Holter

    Los monitores Holter registran la actividad cardíaca durante un máximo de dos días. Los electrodos que se colocan en el pecho se conectan a un pequeño dispositivo que recopila información durante todo el período de la prueba. El dispositivo se puede llevar alrededor del cuello o en un cinturón o correa para el hombro. También se le pedirá que tome nota de cualquier síntoma que tenga mientras lo lleve puesto.

    Al final del período de prueba, su médico revisará las grabaciones del ECG y analizará los próximos pasos.

  • Monitores de eventos

    Monitores de eventos

    Los monitores de eventos también son dispositivos portátiles y hay muchos tipos diferentes. Algunos registran el ECG de forma continua, mientras que otros requieren que actives el dispositivo manualmente.

    Un monitor de eventos sintomáticos, por ejemplo, le permite registrar un ECG cuando se presentan los síntomas. Cuando siente un síntoma, sostiene el monitor sobre su pecho y este registra y almacena una lectura del ECG.

    Otro tipo de monitor de eventos se coloca debajo de la piel del pecho. Se trata de dispositivos llamados registradores de bucle implantables que pueden controlar la actividad del corazón durante años. Estos dispositivos envían transmisiones inalámbricas de las grabaciones a un médico, que puede avisarle si sus lecturas sugieren que necesita atención médica inmediata.

Qué esperar al hacerse un electrocardiograma

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Si le van a hacer un electrocardiograma en el consultorio de su cardiólogo o en otro lugar, la prueba será muy sencilla e indolora. No requiere mucha preparación, excepto algunos consejos básicos de cuidado personal. El día de la prueba, evite ponerse lociones o aceites en el pecho y elija una camiseta que sea fácil de quitar.

Si recibe un ECG portátil, recibirá instrucciones detalladas sobre cómo utilizar el dispositivo.

  • Antes de un electrocardiograma

    Antes de un electrocardiograma

    Justo antes de que le realicen un electrocardiograma en el consultorio de su médico, se recostará en una mesa de examen y un médico le colocará electrodos en el pecho. Es posible que deban afeitarle el pecho para proporcionar una superficie lisa para los electrodos.

  • Durante un electrocardiograma

    Durante un electrocardiograma

    Durante un electrocardiograma, los electrodos se conectan a un electrocardiógrafo, que mide las señales eléctricas del corazón. Durante la prueba, usted permanecerá inmóvil y respirará con normalidad. Es posible que su médico le pida que contenga la respiración en determinados momentos.

    La prueba normalmente dura entre cinco y 10 minutos.

  • Después de un electrocardiograma

    Después de un electrocardiograma

    Una vez finalizado, el médico retirará con cuidado los electrodos. Su lectura se enviará al médico que lo derivó. A menos que tenga una afección cardíaca urgente que requiera atención inmediata, puede reanudar sus actividades diarias normales.

    ¿Hay algún efecto secundario?

    Los electrocardiogramas no implican la introducción de electricidad en el cuerpo, por lo que no existe riesgo de descarga eléctrica. Es posible que experimente una irritación temporal de la piel una vez que le retiren los electrodos. No debería sentir dolor ni molestias durante la prueba, pero avise a su médico si siente algo así.

    Algunas afecciones médicas y otros factores, como tomar determinados medicamentos o estar embarazada, pueden afectar los resultados. Su médico le aconsejará qué hacer y qué no hacer antes de la prueba y le informará sobre pruebas alternativas, si es necesario.

Los resultados de su electrocardiograma

Ya sea que tenga un ECG en el consultorio o use un monitor cardíaco portátil, su cardiólogo revisará su ECG y buscará señales de que su corazón está latiendo:

  • Demasiado rápido (más de 100 pulsaciones por minuto)
  • Demasiado lento (menos de 60 pulsaciones por minuto)
  • Irregularmente

¿Debo preocuparme por un ECG anormal?

Su médico analizará con usted los resultados del ECG y le explicará lo que muestran. Si se encuentran anomalías, le indicará qué tipo de afecciones cardíacas son responsables de sus síntomas. Es posible que su médico deba realizar más pruebas, como un ecocardiograma o una prueba de esfuerzo, para confirmar el diagnóstico.

Si un ECG permite llegar a un diagnóstico, su cardiólogo trabajará con usted para analizar los pasos a seguir y determinar la opción de tratamiento adecuada. El tipo de afección cardíaca que padece y su gravedad, así como su estado de salud general, orientarán su toma de decisiones.

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