Según la Asociación Estadounidense del Corazón, practicar la meditación y la atención plena puede ayudarlo a controlar el estrés y la presión arterial alta, dormir mejor, sentirse más equilibrado y conectado, e incluso reducir el riesgo de enfermedades cardíacas.
Algunos estudios han relacionado la meditación con arterias más sanas y un mejor flujo de sangre al corazón. Se necesitan estudios adicionales para comprender mejor la asociación entre la meditación y la salud cardiovascular, pero los expertos coinciden en que esta práctica puede ser buena para el corazón. Hay muchos tipos de meditación. Algunos de los tipos populares son:
- La meditación Heartfulness es una meditación basada en el corazón que fomenta la paz, el equilibrio y el bienestar general.
- La meditación de atención plena puede usar un objeto de enfoque, como una campana que suena, un canto, tocar cuentas o mirar un objeto.
- La meditación trascendental le permite a su mente enfocarse hacia adentro mientras permanece alerta a otros pensamientos y sensaciones.
- Otros estilos de meditación incluyen: compasión, perspicacia, mantra, zen y otros.
Prueba diferentes tipos de meditación para descubrir cuál disfrutas más. La clave es concentrarse en su respiración para que su mente no divague. Si se desvía, llévelo lentamente de regreso a su respiración. Alargue lentamente la cantidad de tiempo que puede permanecer enfocado. La meditación no es un sustituto de la medicación o el tratamiento médico, pero puede ser una forma de que usted se haga cargo de su salud.