Cómo dar gracias afecta tu salud

Todos los años, en el Día de Acción de Gracias, mis padres nos animan a dar la vuelta a la mesa y hacer una lista de algo por lo que todos estamos agradecidos. Somos una familia bastante grande, así que esto puede durar bastante tiempo, pero es algo que espero con ansias cada año.

Eso sí, nunca lo entiendo bien. Siempre me pongo un poco nervioso; ya sea sintiendo que he dicho demasiado o tan pronto como pasa a la siguiente persona, pienso en un millón de cosas adicionales que debería haber enumerado, porque realmente, al final del día, estoy agradecido por tanto mucho en mi vida. Esta es una tradición familiar que siempre he disfrutado, pero nunca le di mucha importancia hasta hace poco.

Como profesional médico, es un pensamiento interesante: la idea de estar agradecido.

Cuando desglosas esta práctica, dando gracias, resulta que tomarse el tiempo para dar gracias cada día puede tener efectos positivos significativos y duraderos tanto en nuestra salud mental como física.

To put it simply, recent studies indicate that people who take the time to practice gratitude, think about or better yet, write down those things in life they are thankful for, show actual health benefits. These can vary from reduced rates of Depresión, improvement in cardiac function, decreased levels of stress and inflammatory markers, and an overall improved perception of happiness.

Estos estudios pueden ser nuevos para la medicina occidental, pero han sido celebrados por innumerables religiones y culturas, muchas de las cuales han fomentado el acto de celebrar la gratitud durante siglos.

Tomando tiempo para estar agradecido

Personally, when I take time out of my day to stop focusing on what might be or what I wish could be, and actually focus on those things that actually are and that bring me happiness, I just feel a little better.

No es algo difícil de hacer. De hecho, solo toma unos minutos, y los estudios indican que si lo hace regularmente, probablemente sea mejor para ello. Como médico, creo que es importante que mis pacientes practiquen diferentes formas de gratitud, pero sé que también debo practicarlo yo mismo. Así que aquí va...

Cosas por las que siento gratitud en este momento:

1. My health, which isn’t perfect (Austin seasonal allergies!) but keeps me feeling pretty dang good and enables me to do the things that matter to me on a daily basis.
2. My family, my parents, husband, sisters, brothers, nieces, aunts, uncles and cousins, who are amazing and fascinating humans and love all my quirks (or at least convincingly pretend to).
3. My husband, who is currently cooking me dinner while I type this after a long day of work.
4. My many, amazing, wonderful friends.
5. My dog Willie, who is a dashing, distinguished 14-year-old gentleman puppy.
6. My profession, which enables me to meet inspiring and fascinating people on a daily basis, and feel needed in this world.
7. My coworkers, who are, plainly put, awesome, and truly care about the patients we serve.
8. Coffee…because it’s coffee.
9. These super soft socks I am wearing. I love socks.
10. Brownies, chocolate chip cookies and Rocky Road ice cream (Ok a few vices).
11.  Yoga. This is another practice with proven health benefits and which celebrates gratitude.
12.  La capacidad de ver la televisión en exceso cuando mi cerebro ha terminado por el día.

Obviamente, podría seguir y seguir, pero honestamente, ya me siento mejor.

This Thanksgiving, I know I’ll have a lot to list off to my family as we go around the table. But true gratitude is about more than just being thankful on a certain day — it’s an attitude of appreciation for the things in your life, big or small, that bring you joy.

Todos tenemos días malos, pero cuando nos tomamos el tiempo para hacer una pausa y recordar lo bendecidos que somos, esos días malos no parecen tan malos. A veces, dar gracias por las pequeñas cosas puede tener un gran impacto.

¡Ahora, pruébalo y verás cuánto mejor te sientes!